Existen muchos síntomas o padecimientos que envían señales de que el sistema digestivo o gastrointestinal no está bien. Cuando se presentan diarreas continuas, distensión estomacal rutinaria o, se padece de acidez, reflujo o dolor abdominal constante; es muy importante que se acuda con un médico especialista. Si bien, muchas de las enfermedades pueden ser resueltas con facilidad; existen otras, que requieren un diagnóstico y un tratamiento más elaborado. Por ello, al notar síntomas prolongados o dolorosos en alguna parte del estómago, al ir al baño (defecar), o cerca del hígado (especialmente en la vesícula), es muy importante que se acuda a valoración especializada, para una evaluación y un correcto tratamiento.